Re-inicio Re-nacimiento

Hace siete años atrás comenzaba el profesorado de arte. Retomaba luego de varios años
mi contacto con el barro, y, desde ese momento supe que ya nunca dejaría de hacerlo.
Siete años que me parecen poco, siento que todavía hay mucho por aprender. Pero aprendí
que la mejor forma es practicando, intentando, reintentando, cambiando, insistiendo,
soltando, transformando.

Buscando, encontrando, dejándome llevar por la inspiración, practicando.Perder el control,
volver a empezar. Meditar, balancearse, pasar por los elementos, reconocer la energía
de los elementales, comprender la materia. Animarse. Expresarse.

Mi mente, un poco obsesiva, recorre feliz las páginas de química y se alimenta de fórmulas
y elementos. Pero como dijo un reconocido científico la fuerza más grande es el amor, y la
alquimia continuamente da cuenta de eso. Todo lo que me pasa con una obra desde que la
concibo hasta que está completamente finalizada es un hecho alquímico, y que de mí requiere
que de lo mejor de mí misma, y dar lo mejor de mí misma es también lograr un equilibrio
más o menos estable en todas las áreas de mi vida. Se siente como hacer todo el tiempo lo
que verdaderamente siento, desde mi centro. (es tan fácil decirlo!) El resultado siempre
depende no sólo de mis conocimientos, sino de mis acciones y pensamientos y sobre todo
de mis sentimientos. De lo que decido hacer con mis emociones. El entorno siempre está para
mostrarnos cuales son nuestros propios juicios, y en qué estamos dejando espacio para
que la palabra de otro u otros nos vulnere. Uno mismo elige a lo que le da poder.
Humanos, aprendemos de errores, seguir intentando es inevitable. Avanzar y crecer es
inevitable. El amor definitivamente no puede especularse. Todo o nada y en los tonos de
gris está el camino, la trama de un extremo al otro. Y si hay que volver a empezar, hay que
hacerlo.

Puede sonar contradictorio, mi vida esta llena de rupturas, y cualquiera podrá opinar quién
sabe qué cosas sobre eso, pero la verdad es que lleva tiempo aprender a amar y sanar todo lo
que yace en nuestro subconsciente.
Al que se sienta capaz de juzgar a otro por sus tiempos, aténgase a las consecuencias. Cada uno de nosotros experimentamos nuestros propios limites, nuestro propio juicio. Sin echar culpas a nadie, el enemigo más grande son siempre el listado de exigencias y expectativas que el deber ser nos cuenta, y lidiar con la mirada y el juicio del "otro", el cual es un reflejo de nuestra propia mirada y juicio.

Deshacerme como mujer de la mirada del patriarcado. De la necesidad de una aprobación o una
guía. De la necesidad de protección. Liberarme de lo que se espera de mí y dar libremente
lo que siento dar en cada momento. Es poco? es mucho? es suficiente? no es suficiente? Me siento
merecedor/a? De qué "etiqueta" me estoy haciendo cargo en cada caso?  En que lugar me ubico?

Aprecio mi camino por todo lo que me enseñó y cada dia me enseña. Doy la bienvenida a los
cambios que se avecinan, reconozco que en mi pasado esta mi combustible, lo que me impulsa
a avanzar, trasmutar, crecer.

Sigo experimentando la vida. Siento que completé un primer ciclo con la cerámica, en estos
siete años logré preparar mis esmaltes, mis pastas, y también experimenté la construcción y uso de hornos a leña, más reciente pero sumamente satisfactorio. Con las formulas aptas para fuego sigo experimentando y creando. Con la escultura también.

Incorporé a mi vida el tarot y la astrología, ... y como la vida se trata de eso, actividades
y experiencias se suman continuamente para integrarnos al todo que manifestamos en nuestra
realidad. Animarme a más, agradecer más, disfrutar más, amar más es el lema para la próxima etapa.

La experiencia me invita más que nunca a confiar en mi, soy todas mis caídas, claro, pero también soy todas las veces que me levanté. La vida invita a bailar, a seguir aprendiendo, a mantener el
movimiento.